Se ha demostrado que los factores de riesgo cardiovascular (incluyendo la presión arterial elevada en reposo, el tabaquismo, el colesterol elevado y la obesidad) están relacionados de forma importante con las respuestas de la presión arterial durante una prueba de esfuerzo submáxima.
Lo más destacado es que la función vascular anormal puede contribuir a las respuestas exageradas de la presión arterial al ejercicio.